Entrevista a Morodo (para Revista Infame*)
ONE LOVE
Morodo en Chile
CRUZÓ EL GRAN CHARCO PARA TOCAR EN EL FESTIVAL 4 PAISES, EN EL TEATRO CAUPOLICÁN, DE CHILE. SU ÉXITO LO LLEVÓ A UNA SEGUNDA PRESENTACIÓN JUNTO A FALSA ALARMA Y MOBB DEEP. EN LA COMODIDAD DE SU HOTEL RECIBIÓ A INFAME, PORQUE TENÍA COSAS QUE CONTAR.
Rubén D. Morodo, lleva la sencillez a flor de piel. Anda por el mundo como un mochilero, desde que se quedó sin casa en su país de origen. Es que este madrileño, perteneciente al crew OZM Posse, lleva a cuestas dos discos oficiales, unas cuantas maquetas y un sinfín de colaboraciones. A nuestro país aterriza sin haber editado material nacionalmente, pero promocionando su segunda producción “Cosas que contar”. Sus seguidores han conseguido parte de su trabajo, mayoritariamente, por Internet y exclusivas disqueras que importan material más underground.
A Chile llegó con su mujer y la banda barcelonesa Rankin´Soldiers. Aloja en un hotel de lujo, que contrasta con su imagen humilde y espontánea. Sonríe a cada momento y responde a las preguntas con las que lo acosa la prensa. Dice no estar acostumbrado a esta parafernalia pero disfruta que su mensaje traspase el “gran charco” y que hoy lo sitúa donde está.
¿Cómo ha sido tu experiencia en Chile?
Es un shock. Allá en España, somos artistas, pero no estrellas. Somos gente del barrio que sacamos el trabajo, pero la mayoría de las disqueras son nuestras. Cuando llegas aquí y ves esa reacción y no hay una promoción, es una cosa musicalmente humilde. Por un lado te eleva, pero por otro lado te asusta. Entonces queda más claro todavía que el trabajo es serio y la batalla está en pie y no puedes caerte porque estás ahí ¿sabes? Personalmente me hace crecer mucho, pero también me asusta. ¡Qué coño! Eso es lo que asusta realmente. Asusta, asusta, pero es muy bueno.
¿Te llagaste a sentir estrella estando acá en Chile?
Te sientes abrumado. Llega un momento que te da esa sensación, pero no lo somos y la gente sabe por donde va la vaina. ¿Cómo no voy a ver el mechero si está aquí? Pero no voy a tocarlo por si me quemo. Te hace ver más que estrellas como escaparate. Es un poco esa historia, los pies en el suelo. No busco fama ni gloria, yo quiero otra cosa. ¿Entiendes cómo te digo?
En alguna entrevista que diste en España, decía que tus amigos te dicen Molodo ¿Cómo es eso?
No, eso no es así. La vaina viene de una broma, de hace muchos años. Salió por una canción que había grabado otra gente. “Morodo moló”, era una rima, como un corito. Y de ahí se quedó con ML, era sólo pa’l tag. Y de ahí lo ha veía la gente y se ha confundido.
¿O sea es Morodo?
Morodo de toda la vida. Morodo es mi apellido y es Morodo, mi nombre. El Molodo, no. Ese es un cuento negro.
Tú empiezas en la música súper chico, a partir de los 11 años, en un grupo rock ¿Cómo llegas a la música negra, al hip hop, al reggae, al ragga?
Pues mira tiene una evolución muy lógica. Tenía 11 años y tocaba batería, con un bro tenía un grupo de rock y tocaba canciones de Black Sabbath, ACDC, Iron Maiden y toda la vaina. Iba a un local a tocar los fines de semana ¡yo era el rey, tío! Estaba en mi salsa, pero luego fui definiendo gustos. Del tocar la batería empecé con la percusión. Fui dejando el rock y las baterías y me fui acercando a los sonidos más tribales. Realmente siendo pelado viene la influencia, juntarme con los rastas, empezar a tocar, hasta hoy. O sea, es una evolución muy natural. Salió de la percusión.
¿Cuáles son tus principales influencias?
Principales influencias, el rap de los ’80, cualquier grupo, vaina como Das EFX, cosas así. Ese estilo de rap, un poquito después del ’80, ya pa’l ’90. Luego raggamuffin, no dancehall, sino raggamuffin como Daddy Freddy, Silver Cat, Super Cat. Y luego, roots. Pero lo primero fue el rap. La influencia es digital como quién dice ¿no?
Tú señalas que no te gusta que te encasillen en un estilo…
Es que no sé. La gente dice “¿Qué eres un rasta o un rapper?” ¡Qué vaina! Ahora mismo, en mi biblioteca musical, lo que más me gusta es José Feliciano, me gusta mucho Raphael, cosas raras ¿sabes? Porque es música también y son cosas que no oigo en otros sitios y de las que aprendo a la hora de hacer música. Entonces, si tú empiezas haciendo reggae, luego te vas al hip hop, cojes vainas de allí, aprendes de esta otra vaina de allá, ¿cómo vas a catalogar eso? ¿Qué es eso? Eso es vibra.
El hip hop, el reggae y, en general, la música negra tiene un fuerte contenido social ¿Sientes esa responsabilidad al momento de hacer música?
Cuando conocí el rap, no entendía una letra sin mensaje y sigo sin entenderla. No entiendo una letra sin mensaje, no me vale. Entonces, no es que me sienta obligado o responsable, es lo que hay que hacer. Puedes llamarlo obligación, pero realmente es un privilegio que hay que aprovechar. Poder hablar por los demás y que llegue y se sepa. A lo mejor hay responsabilidad en cierto modo, pero yo soy un poco inconsciente (ríe) Soy un poco coco loco, y la verdad voy dispara’o y luego me doy cuenta de lo que va pasando.
¿Eso es lo que más te mueve a hacer música? ¿Esa responsabilidad social?
Lo que más me lleva en tiempo real es el nudo. Puedo estar seis meses y a lo mejor no escribo nada y de repente me levanto en una mañana y hago tres temas. De repente tengo algo que decir y tengo que sacarlo. Después de eso aprovechas, dices “voy a hacer bien para mí, voy a curarme y vamos a ver qué más podemos hacer”. La primera motivación es curar. Curar el mal que llevas dentro por algún motivo. Por el chance que te esté perturbando y necesitas purificarlo de alguna manera. Ese es el primer impulso ¿sabes? Y luego pues claro, se abre y abarca más.
Pasando a otro tema ¿Qué significa para ti Rastafarie?
Todo, realmente todo. Rastafarie, Jah Jah es libertad, es amor, realmente es amor. Yo siempre digo que el hombre crea todo lo malo y es el demonio, genera egoísmo, envidia, maldad, armas, odio. El hombre genera esas cosas materiales, pero Jah Jah sólo te da amor y eso es lo único que el hombre tiene que sentir ¿entiendes?
¿Y cómo logras llegar a esa conexión?
Quemándome a mi mismo. Muchos rastas dicen hay que quemar Babilon, hay que quemar… ¡No!... quémate a ti. Quémate, purifícate. Tienes que caer y levantarte y luego di si lo has encontrado, si estas más a gusto, pero primero quémate.
¿A qué edad te acercas a la cultura Rastafarie?
Con 16 años empiezo a practicar en la orden. Más o menos con 16 empecé en la cultura, pero hasta que me introduje bien pasaron 4 ó 5 años. Hasta que me metí en el binghi, empecé a aprender realmente, comencé a ir a la escuela, como quien dice y hablar con los ancianos. Pasó mucho tiempo hasta que me quité la vanidad de la cabeza, para ser humilde y escuchar. Ahora mismo llevaré unos seis años de consciencia real. Todo lo demás lo aprendes, lo oyes, pero eres un papagayo ¿entiendes?
¿A través de qué se genera?
A raíz del amor tío, a raíz del amor. De estar compartiendo ahora, de estar hablando más temas. Aprendiendo del que tiene algo que decir y callarte cuando tienes que callar. Saber reconocer dónde está el sabio. Yo creo que ese es el camino y sobre todo amor. Un amor de humildad, un amor real, un amor de sencillez ¿me entiendes? Yo creo que es así, pero claro es personal, cada uno tiene su vivencia, su situación. Cada uno es diferente y tiene su evolución y su aprendizaje. El maestro llega cuando el alumno está preparado.
Tus discos escasamente llegan a nuestro país, generalmente se consiguen a través de Internet ¿Piensas editar algo en Chile?
Vamos a ver, separamos mensaje de industria ¿vale? Es necesaria la industria. Yo como de la industria. Claro que me interesa, egoístamente me interesa, porque es más movimiento, son más locaciones, es abarcar más. Cuando abarcas más el mensaje es más grande, porque llega a más sitios, es más poder. Pero bueno, me interesa también depende de cómo, qué se haga y qué intensión tenga. Es que son equilibrios todos ¿no? Me interesa editar aquí en Chile o editar en cualquier otro país. Eso crecimiento es, como artista te propulsa más ¿cómo te voy a decir que no?
¿Estas preparando algo nuevo?
Tengo varios proyectos en la cabeza, pero la verdad entre la disquera, la gira, no tengo tiempo para nada ¿sabes? Tengo un proyecto, mi tercero. Tengo un proyecto con mi crew, de sacar un disco con Chojín, Meko y un par de friends más, pero claro, yo estoy aquí, ellos están allá cada uno tenemos nuestras carreras. Tengo proyecto de hacer calypso, quiero una mini colección de calypso. Estoy cumpliendo ahora aquí y cuando termine y tenga tiempo o del árbol se caiga la manzana, pues me la comeré.
En cuanto a lo personal ¿Tienes proyectos de tener hijos?
Mira hijos no, hijos no hay por hoy. No tengo ni casa ¿cómo voy a tener hijos?
¿Cómo fue eso de que te quedaste sin casa?
Tenía una casa con un friend, robaron en la casa, y yo no estaba. Me robaron sólo a mi. Estaba de gira y dije no voy a escuchar nada me voy. Me fui a Caracas con mi mujer, ella es de allí. Cuando volví a España no tenía casa, me robaron la plata para meterme en una casa, no podía hacer nada. Me fui a Caracas a hacer unos shows. Cuando volví a España hablé con mi hermana mayor y ella me metió en su casa. Estoy viviendo con mi mujer en casa de su familia, y cuando voy a España en casa de mi hermana. Estoy todo mochilero por ahí ¿sabes?
¿Es esto lo que te impide proyectarte en lo personal?
Tengo mis cosas repartidas por el mundo. Entonces ¿cómo voy a plantearme yo nada? Con mi mujer todo chévere, todo fino y siempre aspirando a más. Pero con calma, mi misión hoy en día creo que es otra. No me considero para nada un maestro, entonces, creo que todavía estoy aprendiendo y me queda mucho por aprender para poder enseñar algo ¿sabes?
¿Qué mensaje le dejarías a los lectores de InFame*?
Un mensaje… Me quedo con lo que hablábamos antes, lo más grande que hay es el amor. Puedes coger un arma, puedes odiar. Todas esas cosas son del demonio, salen por manos del hombre, pero lo único que realmente es puro y divino es el amor y es lo que hay que cuidar. Un amor, eso es lo que digo. One love, bless.*
A Chile llegó con su mujer y la banda barcelonesa Rankin´Soldiers. Aloja en un hotel de lujo, que contrasta con su imagen humilde y espontánea. Sonríe a cada momento y responde a las preguntas con las que lo acosa la prensa. Dice no estar acostumbrado a esta parafernalia pero disfruta que su mensaje traspase el “gran charco” y que hoy lo sitúa donde está.
¿Cómo ha sido tu experiencia en Chile?
Es un shock. Allá en España, somos artistas, pero no estrellas. Somos gente del barrio que sacamos el trabajo, pero la mayoría de las disqueras son nuestras. Cuando llegas aquí y ves esa reacción y no hay una promoción, es una cosa musicalmente humilde. Por un lado te eleva, pero por otro lado te asusta. Entonces queda más claro todavía que el trabajo es serio y la batalla está en pie y no puedes caerte porque estás ahí ¿sabes? Personalmente me hace crecer mucho, pero también me asusta. ¡Qué coño! Eso es lo que asusta realmente. Asusta, asusta, pero es muy bueno.
¿Te llagaste a sentir estrella estando acá en Chile?
Te sientes abrumado. Llega un momento que te da esa sensación, pero no lo somos y la gente sabe por donde va la vaina. ¿Cómo no voy a ver el mechero si está aquí? Pero no voy a tocarlo por si me quemo. Te hace ver más que estrellas como escaparate. Es un poco esa historia, los pies en el suelo. No busco fama ni gloria, yo quiero otra cosa. ¿Entiendes cómo te digo?
En alguna entrevista que diste en España, decía que tus amigos te dicen Molodo ¿Cómo es eso?
No, eso no es así. La vaina viene de una broma, de hace muchos años. Salió por una canción que había grabado otra gente. “Morodo moló”, era una rima, como un corito. Y de ahí se quedó con ML, era sólo pa’l tag. Y de ahí lo ha veía la gente y se ha confundido.
¿O sea es Morodo?
Morodo de toda la vida. Morodo es mi apellido y es Morodo, mi nombre. El Molodo, no. Ese es un cuento negro.
Tú empiezas en la música súper chico, a partir de los 11 años, en un grupo rock ¿Cómo llegas a la música negra, al hip hop, al reggae, al ragga?
Pues mira tiene una evolución muy lógica. Tenía 11 años y tocaba batería, con un bro tenía un grupo de rock y tocaba canciones de Black Sabbath, ACDC, Iron Maiden y toda la vaina. Iba a un local a tocar los fines de semana ¡yo era el rey, tío! Estaba en mi salsa, pero luego fui definiendo gustos. Del tocar la batería empecé con la percusión. Fui dejando el rock y las baterías y me fui acercando a los sonidos más tribales. Realmente siendo pelado viene la influencia, juntarme con los rastas, empezar a tocar, hasta hoy. O sea, es una evolución muy natural. Salió de la percusión.
¿Cuáles son tus principales influencias?
Principales influencias, el rap de los ’80, cualquier grupo, vaina como Das EFX, cosas así. Ese estilo de rap, un poquito después del ’80, ya pa’l ’90. Luego raggamuffin, no dancehall, sino raggamuffin como Daddy Freddy, Silver Cat, Super Cat. Y luego, roots. Pero lo primero fue el rap. La influencia es digital como quién dice ¿no?
Tú señalas que no te gusta que te encasillen en un estilo…
Es que no sé. La gente dice “¿Qué eres un rasta o un rapper?” ¡Qué vaina! Ahora mismo, en mi biblioteca musical, lo que más me gusta es José Feliciano, me gusta mucho Raphael, cosas raras ¿sabes? Porque es música también y son cosas que no oigo en otros sitios y de las que aprendo a la hora de hacer música. Entonces, si tú empiezas haciendo reggae, luego te vas al hip hop, cojes vainas de allí, aprendes de esta otra vaina de allá, ¿cómo vas a catalogar eso? ¿Qué es eso? Eso es vibra.
El hip hop, el reggae y, en general, la música negra tiene un fuerte contenido social ¿Sientes esa responsabilidad al momento de hacer música?
Cuando conocí el rap, no entendía una letra sin mensaje y sigo sin entenderla. No entiendo una letra sin mensaje, no me vale. Entonces, no es que me sienta obligado o responsable, es lo que hay que hacer. Puedes llamarlo obligación, pero realmente es un privilegio que hay que aprovechar. Poder hablar por los demás y que llegue y se sepa. A lo mejor hay responsabilidad en cierto modo, pero yo soy un poco inconsciente (ríe) Soy un poco coco loco, y la verdad voy dispara’o y luego me doy cuenta de lo que va pasando.
¿Eso es lo que más te mueve a hacer música? ¿Esa responsabilidad social?
Lo que más me lleva en tiempo real es el nudo. Puedo estar seis meses y a lo mejor no escribo nada y de repente me levanto en una mañana y hago tres temas. De repente tengo algo que decir y tengo que sacarlo. Después de eso aprovechas, dices “voy a hacer bien para mí, voy a curarme y vamos a ver qué más podemos hacer”. La primera motivación es curar. Curar el mal que llevas dentro por algún motivo. Por el chance que te esté perturbando y necesitas purificarlo de alguna manera. Ese es el primer impulso ¿sabes? Y luego pues claro, se abre y abarca más.
Pasando a otro tema ¿Qué significa para ti Rastafarie?
Todo, realmente todo. Rastafarie, Jah Jah es libertad, es amor, realmente es amor. Yo siempre digo que el hombre crea todo lo malo y es el demonio, genera egoísmo, envidia, maldad, armas, odio. El hombre genera esas cosas materiales, pero Jah Jah sólo te da amor y eso es lo único que el hombre tiene que sentir ¿entiendes?
¿Y cómo logras llegar a esa conexión?
Quemándome a mi mismo. Muchos rastas dicen hay que quemar Babilon, hay que quemar… ¡No!... quémate a ti. Quémate, purifícate. Tienes que caer y levantarte y luego di si lo has encontrado, si estas más a gusto, pero primero quémate.
¿A qué edad te acercas a la cultura Rastafarie?
Con 16 años empiezo a practicar en la orden. Más o menos con 16 empecé en la cultura, pero hasta que me introduje bien pasaron 4 ó 5 años. Hasta que me metí en el binghi, empecé a aprender realmente, comencé a ir a la escuela, como quien dice y hablar con los ancianos. Pasó mucho tiempo hasta que me quité la vanidad de la cabeza, para ser humilde y escuchar. Ahora mismo llevaré unos seis años de consciencia real. Todo lo demás lo aprendes, lo oyes, pero eres un papagayo ¿entiendes?
¿A través de qué se genera?
A raíz del amor tío, a raíz del amor. De estar compartiendo ahora, de estar hablando más temas. Aprendiendo del que tiene algo que decir y callarte cuando tienes que callar. Saber reconocer dónde está el sabio. Yo creo que ese es el camino y sobre todo amor. Un amor de humildad, un amor real, un amor de sencillez ¿me entiendes? Yo creo que es así, pero claro es personal, cada uno tiene su vivencia, su situación. Cada uno es diferente y tiene su evolución y su aprendizaje. El maestro llega cuando el alumno está preparado.
Tus discos escasamente llegan a nuestro país, generalmente se consiguen a través de Internet ¿Piensas editar algo en Chile?
Vamos a ver, separamos mensaje de industria ¿vale? Es necesaria la industria. Yo como de la industria. Claro que me interesa, egoístamente me interesa, porque es más movimiento, son más locaciones, es abarcar más. Cuando abarcas más el mensaje es más grande, porque llega a más sitios, es más poder. Pero bueno, me interesa también depende de cómo, qué se haga y qué intensión tenga. Es que son equilibrios todos ¿no? Me interesa editar aquí en Chile o editar en cualquier otro país. Eso crecimiento es, como artista te propulsa más ¿cómo te voy a decir que no?
¿Estas preparando algo nuevo?
Tengo varios proyectos en la cabeza, pero la verdad entre la disquera, la gira, no tengo tiempo para nada ¿sabes? Tengo un proyecto, mi tercero. Tengo un proyecto con mi crew, de sacar un disco con Chojín, Meko y un par de friends más, pero claro, yo estoy aquí, ellos están allá cada uno tenemos nuestras carreras. Tengo proyecto de hacer calypso, quiero una mini colección de calypso. Estoy cumpliendo ahora aquí y cuando termine y tenga tiempo o del árbol se caiga la manzana, pues me la comeré.
En cuanto a lo personal ¿Tienes proyectos de tener hijos?
Mira hijos no, hijos no hay por hoy. No tengo ni casa ¿cómo voy a tener hijos?
¿Cómo fue eso de que te quedaste sin casa?
Tenía una casa con un friend, robaron en la casa, y yo no estaba. Me robaron sólo a mi. Estaba de gira y dije no voy a escuchar nada me voy. Me fui a Caracas con mi mujer, ella es de allí. Cuando volví a España no tenía casa, me robaron la plata para meterme en una casa, no podía hacer nada. Me fui a Caracas a hacer unos shows. Cuando volví a España hablé con mi hermana mayor y ella me metió en su casa. Estoy viviendo con mi mujer en casa de su familia, y cuando voy a España en casa de mi hermana. Estoy todo mochilero por ahí ¿sabes?
¿Es esto lo que te impide proyectarte en lo personal?
Tengo mis cosas repartidas por el mundo. Entonces ¿cómo voy a plantearme yo nada? Con mi mujer todo chévere, todo fino y siempre aspirando a más. Pero con calma, mi misión hoy en día creo que es otra. No me considero para nada un maestro, entonces, creo que todavía estoy aprendiendo y me queda mucho por aprender para poder enseñar algo ¿sabes?
¿Qué mensaje le dejarías a los lectores de InFame*?
Un mensaje… Me quedo con lo que hablábamos antes, lo más grande que hay es el amor. Puedes coger un arma, puedes odiar. Todas esas cosas son del demonio, salen por manos del hombre, pero lo único que realmente es puro y divino es el amor y es lo que hay que cuidar. Un amor, eso es lo que digo. One love, bless.*
Etiquetas: "cosas que contar", caupolicán, chile, infame, morodo
6 Comments:
parece que soy la unica que escribio un mensaje, pero bueno, me gusto mucho esta entrevista. buscaba entrevistas de morodo, cuando la encontre, creo que a parte de guapo este man es genial, no solo por sus temas, tambien por su espiritu, dice tanta realidad que quedas con ganas de escuchar mas...BENDICIONES!
Es un privilegio haber visto una entrevista de este pionero del reggea/rap.Si escuchas a MORODO en culaquier estado de animo siempre me relaja y me gustan mucho sus mensajes Recomiendo canciones como: Te dejo la ciudad, no vale la pena, ciudada maravilla y estoy cansao. TULY125 LEGANES.PAZ.
morodo para mi si eres un maestro, e aprendido mucho de tu musica y realmente tu musica relaja, me gustan tus cnaciones por que hablas verdades eres el mejor solo qeu vengas a PERU hay mucha gente que escuchamos tu misca y quieramos tener el privilegio de escucharte en persona.
Está bien. Blanquito, rastas, voz forzada y, además, seguidor de Jah. Es impresionante como, en occidente, somos capaces de absorver formas de vida, músicas y hasta religiones con un desparpajo que asusta.
Dejando a un lado el tema de la música y sus habituales letras homófobas y muchas veces reaccionarias, y los delirios de grandeza que tiene este hombre (a pesar de sus palabras que hablan de humildad), da miedo pensar que, en el siglo XXI todavía nos de por admirar a un supuesto Dios (Jah)o su mesías Haile Selassie, el cual cometió un genocidio contra disidentes, homosexuales y gentes "de mal vivir". Me pregunto con qué autoridad se puede hablar de Babilonia y de su deseo de incendiarla porque oprime a los hombres (los rastafaris no suelen incluir a las mujeres en ciertos temas)y luego posa y actúa como una rock star más con un caché que se podría definir como "estratosférico".
Esta es mi opinión. No creo que un hombre que habla de espiritualidad y de creencias de dudosa humanidad pueda ser capaz de crear opinión y ser "un maestro" y que se le llame "pionero del reggae/rap". Por favor, que esa música tiene cerca de 60 años!!!
Ama el Reggae. No tragues con su religión.
Espiritualidad Sí! Religión No!
Jose tu no tienes que decir a la gente que hacer o que no hacer, o lo que creer o no creer, mucho menos criticar destructivamente porque no eres nadie para eso... pareces el típico ser que cree tener la verdad absoluta, me pregunto: ¿no será mejor vivir y dejar vivir? por cierto, la envidia es una enfermedad... así que casi mejor atácate a ti mismo(tal vez así te superes) que Morodo ya hizo lo que tenia que hacer y en eso sigue.
Joseee critica a los que estén a tu altura no los que estén por encima que quedas en evidencia... ponte a currar que ya esta bien!
menuda falsedad de artículo, Morodo no habla así, no es su manera de expresarse, no es de él. Esta entrevista NO es a Morodo, ES INVENTADA.
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