Explosión del hip hop español en Chile
La Reconquista hispana
Quizá fue la sensualidad de la entonación del castellano de España. Tal vez, sólo ese algo especial de ser extranjero, lo que suele llamar la atención entre algunos personajes de nuestro país o, hasta puede ser esa familiaridad de escuchar música en tu mismo idioma. Lo cierto es que el hip hop español conquistó a los chilenos y hoy más que nunca sigue cautivando.
Por Constanza Martínez
A fines de los años ochenta llega el hip hop a nuestro país adquiriendo a lo largo del tiempo gran número de adherentes. Tenues luces aparecen de este estilo en nuestro idioma, el español, lo que se hace es poco y más bien amateur. Terminando el siglo XX se empieza a escuchar grupos provenientes del viejo continente que calan en esta nueva cultura que para estas alturas ya forman una comunidad importante en Chile.
Letras que los chilenos entienden, con ello mejor contenido y métrica. “Dentro del rap en castellano es uno de los más avanzados con mejor métrica y contenido. Mc’s que evolucionan y no se estancan como hay muchos en Chile y en general en habla hispana.” (Ackos). Más medios para lograr un buen sonido y gente que apoya a sus grupos y mc’s. Sumado a que intentan reforzar su nivel internacionalmente, son parte de los motivos que llevan este auge del hip hop español.
El génesis de una historia sin fin
Al otro lado del gran charco, la historia se escribía casi en paralelo con Chile, pero acelera y toma una velocidad que sobrepasa el nivel nacional. En 1989 se graba el primer disco de hip hop español en Madrid, titulado “Madrid hip hop”, bajo el sello independiente Troya. El éxito de esta producción llevaría a las compañías multinacionales a la búsqueda compulsiva de grupos y mc’s. Con el pasar de los años, la gente que hace hip hop, se ve obligada por la intervención de las multinacionales a formar un movimiento. Se refuerza la actividad independiente, separando claramente hasta qué punto puede inmiscuirse cada parte, dejando en manos de los grandes sólo la distribución, pero en las propias lo referido a la producción.
El Club de los Poetas Violentos, más conocido como CPV, viene a ser el hito en España que separa la historia entre un antes y un después. “Yo gano” es el triunfo para un país completo que ahora ve más allá de la línea del horizonte en sus costas. Ahora, al igual que Colón, lanza su mirada al nuevo continente y cual caballero en busca de hidalguía se lanza a la conquista de un pueblo que en un futuro no muy lejano se convertiría en sus más fervientes seguidores.
Discos que empiezan a correr de mano en mano, fue el elemento fundamental para dar a conocer este nuevo estilo dentro del hip hop. Sin duda, la net fue la excusa perfecta para que se expandiera de forma explosiva. Disqueras alternativas en Chile importaban el material español, el cual cada vez era más requerido. 7 notas 7 colores, CPV y Ari, son considerados por la mayoría como los más importantes de la época. Son los que marcan la pauta y abren puertas al resto de los españoles.
El año de los conciertos
La guinda de la torta era el concierto que vendría a ser la respuesta de reciprocidad a tantos seguidores. Sería la muestra por parte de los hispanos de que el pueblo chileno sí era importante para ellos y ese día, a pesar de que tardó, llegó un once de junio del año 2000 con uno de los representantes más destacados: 7 notas 7 colores.
“Fue bacán igual. Había la media cola pa’ entrar. Nos quitaron los plumones y entramos po. Salió Tapiarabia, parece. Después salieron unos hueones enmascarados, ni me acuerdo quiénes eran, parece que Némesis o la orden 9 ojos, pasaron sin pena ni gloria. Salió el Dj Squad y se tiró el disco entero de CPV “La saga continua 24/7”. Después, salió 7 notas. La gente aplaudía caleta y quedó la media cagá. De la galería veía a toda la gente abajo saltando, todos apretados. Empezó el show y entre todo lo que hizo, cantó y habló, se le cayeron los pantalones, se fumó un pito y dijo que iba a venir pa’l verano a hacer un show gratis. La pura mula”(Ackos) “Mucho Mu, piola... eso sí el Mucho Mu prometió un concierto gratis pa’l verano, porque según él no estaba dando todo de sí mismo, una huea así... Juice”(Pancochino).
Definitivamente quedaría en la historia. Luego, en Septiembre (2) del mismo año, Ari llenaría un estadio. En reemplazo a Vico C, miembros de CPV, arrasan y no se volvió a oír del caribeño. “El estadio Víctor Jara estaba lleno. Tocaron varios grupos chilenos. Entre ellos un grupo de la Anita de Makiza. Tocaron unos pendejos que dejaron la cagá. Una de las hueas bacanes que pasaron fue que se subió el guatón de la DMS a decir que Vico C no venía. Se subió con un escudo, le lanzaron hueas y dijo “qué onda, pero les tenemos CPV” y quedó la cagá. Después Ari fue muy bacán. El estadio estaba lleno”(Chelo G)
El éxito español estaba comprobado y bien lo sabían productores del movimiento, como otros más comerciales que vieron reflejado en signo pesos la gran mayoría de eventos en los que estuvo presente algún hispano. Sólo el año 2004, estuvieron en concierto en nuestro país más de cuatro grupos españoles. Pero el hip hop se niega a mantenerse bajo el yugo comercial y a duras penas, lo logra.
La doble H VIP
Luego de comprobarse el éxito con los conciertos de Mucho Muchacho y posteriormente el de Ari, las productoras más comerciales vieron en el público hip hop un inminente generador de dinero. Sin embargo, recién tres años más tarde vendría la reconquista española. Con Doble V (Violadores del Verso), quienes son invitados a participar del festival Rock en Ñ, cuya avasalladora asistencia dio para un segundo concierto en el mismo lugar, Sala SCD Vespucio y dos más en el barrio Bellavista y Gimnasio Municipal de Pudahuel. Los eventos a partir de este año se multiplican... el valor de las entradas también.
Un año más tarde sería el apogeo del hip hop español en Chile. Frank-t abriría la jornada en el teatro Providencia, repletando el lugar, sobrepasa las expectativas de los organizadores. Tiempo después, Shotta, Niko, Buda, por un lado y SFDK, por otro, se presentarían un 4 y 5 de Junio respectivamente. Aunque el primer concierto no logró llenar ni la mitad del recinto (Estadio Víctor Jara) el segundo día se conseguiría, por lo menos, un lleno parcial que no se repetiría días más tarde en el Galpón Víctor Jara.
El Tech Fest se encargaría de traer por segunda vez a Ari, sin embargo, ni la difusión, ni el atractivo de las jornadas que le antecedieron convenció al público para que asistiera al Museo Histórico Militar esa lluviosa noche de junio. Los asistentes con suerte sumaban cien.
La Mala Rodríguez, junto a Solo los Solo y Dj. Craze, entre otros, se presentó en mayo (14) de este año. La Estación Mapocho, pese a la polémica, se repletó alcanzando un número aproximado de ocho mil asistentes. No necesariamente raperos “La Mala Rodríguez no tiene mucho publico hip hop, pero es que la música de la Mala rompe esquemas. Es decir, llega a varios sectores” (Chelo G)
La gran mayoría de estos eventos logró la asistencia esperada. Las cuentas fueron positivas, sobretodo para los bolsillos de los productores. Mientras tanto, el movimiento local, revertía la cifra. Pocas veces se logra llenar un concierto que no supera los dos mil pesos, generalmente en sus entradas. Los mc’s y grupos locales muy por el contrario de los hispanos, son criticados y atacados por los propios chilenos y el movimiento se estanca.
Continuará...
El hip hop español se transforma en tendencia, en estilo, el cual es imitado por muchos, por otros usado como referencia. Está allí para marcar una visión de cómo se hace hip hop en el mundo. “Hay caleta de mc’s que imitan, también están los influenciados que al escucharlos se les encuentra un parecido por la métrica y las pistas y están los que simplemente no se parecen en nada. Yo encuentro que está bien influenciarse, porque en la mayoría de los casos es un rap inteligente con un buen contenido y música, pero ya imitar, no pasa na”(Ackos) “En Chile hay talento de sobra y en muchos casos el talento de acá no tiene nada que envidiarle a nadie, y ese es el problema, en Chile hay mucha gente que no ve eso y se dedica a admirar el hip hop extranjero cuando ante sus ojos tienen verdaderos talentos en bruto.”(Caco).
Lejos de ser una moda, el hip hop español, se consolidó en nuestro país y evolucionó a la velocidad de la luz. “Moda se podría haber catalogado hace años, pero lleva mucho tiempo. Si los españoles siguen sacando buenas producciones seguiremos muy por debajo. Lo que no quiere decir que Chile sea malo.”(Chelo G) “Nunca he creído que es moda, porque si fuera moda entonces escuchar rap gringo es una moda que siempre ha estado.” (Ackos)
Desde el extranjero también existe una mirada a este fenómeno. Pizko mc nació en Francia, hijo de chilenos piensa sobre el hip hop español “que el nivel que tienen es fome. Les falta mucho. Lo otro con el rap español, no sé por qué a la gente aquí le gusta, porque aquí hay más estilo. Hay unos raperos que son buenos como Tote King y Nach, el resto, los famosos, la Mala Rodríguez, etc... no me gustan”. Caco vivió en España, su opinión no difiere mucho de la del chileno-francés. “Yo no estoy tan de acuerdo con ese boom que hay de españoles en Chile, de alguna forma esta bien, hay muchos que tienen talento y su hip hop es bueno y claro hay algunos que merecen verlos en vivo, pero al extremo que llegan algunos por estos grupos españoles, yo no lo comparto”
Se acerca el concierto de Nach Scratch, uno de los más esperados en nuestro país. Las expectativas son de repletar el recinto, mientras los eventos nacionales, siguen esperando sustentarse con los asistentes. “Lo que pasa es que aquí es difícil sacar un grupo, porque los chilenos no nos queremos. Si quisiéramos a nuestros mc’s uffff.”(Chelo G) “Ese cambio parte por casa y cuando eso pase llegaremos al día que seamos nosotros que podamos ir a España o a cualquier lugar del mundo y nos den el mismo espacio y la misma difusión que le damos acá a los grupos de afuera. Pa’ mi es simplemente eso, me gustaría algún día llegar a ver la misma difusión y disponibilidad que hay dentro de este movimiento para grupos nacionales”(Caco). Lo cierto es que hip hop español tenemos para un buen tiempo más. “El rap español tiene pa’ rato, de ahí a que les siga gustando a todos es otra cosa. Yo creo que los españoles ya alcanzaron un nivel mundial y están empezando a expandir su música hacia otros lados como Chile, por ejemplo, y así va a seguir hasta que se deje de hacer rap en el mundo”(Ackos).
